El Ayuntamiento progresista de Algemesí, progresista aunque cuente con el apoyo y la participación de Ciudadanos, ha claudicado ante la evidencia: prevé agresiones sexuales durante la celebración de su semana taurina.
Y así, para los viernes y sábados, de doce de la noche a tres de la madrugada, ha dispuesto de un “punto seguro” de atención a todas las chicas que sufran acoso o agresión sexual. En ese “punto violeta” serán atendidas y asesoradas por personal especializado.
¿Cómo es posible que este consistorio se conforme con atender a las agredidas y acosadas y no trate de buscar antes el remedio para que jamás se produzca incidente alguno? ¿Cómo es posible que, ante este terrible anuncio del Ayuntamiento, los padres aún se estén pensando si dejan salir o no a sus hijas adolescentes por las calles nocturnas de Algemesí?
Alguno dirá que nada se puede hacer por evitar que los jóvenes consuman alcohol y drogas durante estos días de fiesta. ¿De verdad que nada se puede hacer? La integridad física o moral de una sola persona está muy por encima de cualquier celebración por muy tradicional que sea. Si no somos capaces de asumir el consumo responsable y de respetar las normas básicas de urbanidad, no cabe otra que poner punto y final a este lamentable espectáculo. Porque una fiesta deja de serlo cuando la gente incontrolada se desmadra y no atiende a razones. Y sí, pagarán justos por pecadores, pero más vale poner remedio que lamentar las consecuencias… aunque nuestro Ayuntamiento, por puro rédito electoral, piense justo lo contrario.